Consejos contra el mareo en los niños.
Las náuseas en los viajes en automóvil son comunes entre los niños.
07/15/2014
„Mamá estoy enferma“ - una frase que es familiar para muchos padres cuando están en el auto con sus hijos. A veces los pequeños sufren tanto por las náuseas del viaje que tienen que vomitar y el viaje no puede continuar. Pero con la ayuda de algunos trucos y consejos, los padres pueden hacer que su viaje sea mucho más placentero para sus hijos..
No hay una explicación general de por qué no todos los niños se ven afectados.
Para muchas familias, un escenario bien conocido: el equipaje finalmente se guarda, los niños se sientan atados al asiento trasero y el viaje en automóvil en las tan esperadas vacaciones finalmente puede comenzar. Pero después de unos pocos kilómetros, el pequeño es repentinamente malo, a veces tan violento que el viaje debe interrumpirse inmediatamente. Si los niños en el auto son malos o no, pero es muy diferente. Incluso los médicos no conocen una explicación general por el hecho de que algunos no están afectados en absoluto y en otros, las náuseas y los vómitos ocurren aún más.. „En algunos, el órgano de equilibrio es aparentemente tan sensible que, sobre todo, las fuerzas centrífugas en las curvas pueden provocar náuseas.“, Hermann Josef Kahl, pediatra en Dusseldorf, frente a la agencia de noticias. „dpa“.
La cinetosis es causada por „confusión“ del cerebro
El llamado „el mareo“ Según Kahl, (la cinetosis) es muy desagradable, pero inofensivo en la mayoría de los casos. La náusea es causada por una „confusión“ del cerebro, porque cada persona se basa generalmente, por una parte, en la percepción de los ojos y, por otra parte, en la sensación de equilibrio en el oído interno. Sin embargo, lo que importa es qué información se transmite desde los sistemas de orientación al cerebro: si los estímulos recibidos coinciden, todo está bien. Sin embargo, si el cerebro recibe señales contradictorias, cambia a una „alarma“ y como resultado, el cuerpo reacciona con náuseas, mareos y malestar general. En el automóvil, esto sucede con relativa rapidez cuando hay más movimiento del que se puede ver, por lo que los niños se sienten particularmente angustiados cuando leen, por ejemplo.
Mejor mirar por la ventana que leer.
Sin embargo, según Kahl, los padres pueden hacer mucho para que su viaje en automóvil sea un poco más placentero. Por encima de todo, una gran cantidad de aire fresco es importante, por lo que debe tomar descansos a intervalos regulares, en los que los niños pueden moverse fuera del automóvil. Además, el experto recomienda que los niños vulnerables no coman tanto antes de un largo viaje. También es útil si los padres dejan que sus hijos miren por la ventana tanto como sea posible, porque las curvas y los bultos también se perciben visualmente, por lo que se puede evitar una diferencia en la percepción entre el ojo y el oído interno. Por otro lado, mirar las cosas hacia abajo tiende a provocar náuseas, por lo que los libros, computadoras portátiles, tabletas y juegos de mesa sobre la marcha, especialmente para niños vulnerables, no son un pasatiempo apropiado para conducir. (Nr)
Imagen: Benjamin Thorn