Si los niños se rompen después de tomar el medicamento ¿Sigues trabajando?
Los niños pequeños vomitan con relativa frecuencia. Las causas generalmente son inofensivas: muy desordenadas, con una mala comida que le revienta el estómago, gran emoción debido a un evento emocionante. Sin embargo, si el niño ha recibido medicamentos antes de vomitar, los padres a menudo se preguntan si deben administrar otra tableta. Aquí la precaución es apropiada: el agente ya podría trabajar..
El cuerpo absorbe los jugos y las soluciones rápidamente.
Si un niño tiene que vomitar poco después de tomar medicamentos, los padres no deben volver a administrarse el medicamento sin más dilación. El agente puede haber desarrollado ya su efecto en el cuerpo. Por ejemplo, la Asociación Federal de Asociaciones de Farmacéuticos Alemanes en su revista Neue Apotheken Illustrierte (número del 15 de julio) explica que el cuerpo normalmente ya ha tomado jugos y soluciones cuando ha transcurrido entre 30 y 60 minutos entre la ingestión y los vómitos..
Vómitos después de la tableta ingerida.
Para las tabletas, sin embargo, esto puede llevar más tiempo. En ese caso, los padres deben comunicarse con su pediatra y preguntar si la píldora debe volver a administrarse. Si el niño tiene que vomitar más tarde o si tiene diarrea, también debe informar al pediatra. Si un niño vomita mientras está acostado, debe levantarlo boca abajo inmediatamente, dicen los expertos de la Asociación Profesional de Pediatras (BVKJ) en su sitio web "kinderaerzte-im-netz.de".
Frente fresca del niño
Los padres también deben poner sus manos o un paño frío en la frente del niño para privar al niño de mareos y náuseas. Además, los expertos aconsejan a los jóvenes enjuagar la boca, para que desaparezca el mal sabor. Adecuados para esto son el agua o el té. Debido a que el estómago está irritado, el niño no debe comer en las próximas horas (en la mayoría de los bizcochos secos o palitos de pretzel) para comer. Sin embargo, los más pequeños deben beber mucho.!
Dale a los niños solo unos pocos medicamentos
En general, debe darles a los niños solo unas pocas pastillas y, en su lugar, intentarlo para quejas más leves con remedios caseros. Sin embargo, si la "enfermedad" se convierte en una enfermedad, es más seguro consultar con el pediatra acerca de la posibilidad de medicamentos. En la pregunta de qué medicamentos son adecuados para los niños, siempre deben estar en primer plano, si su uso es realmente necesario o si los síntomas no pueden aliviarse por medios naturales. (Ad)