Prevenir la enfermedad del viaje en los niños.

Prevenir la enfermedad del viaje en los niños. / Noticias de salud
Tiempo de vacaciones, tiempo de viaje. Especialmente los niños hacen largos viajes en coche mareos y dolor abdominal. El fenómeno se llama enfermedad del viaje. Pero algunos consejos pueden prevenir las náuseas y los vómitos..

"La enfermedad del viaje es particularmente probable que afecte a los niños entre las edades de dos y doce años", informa la Asociación de Pediatras (BVKJ). Ni leer ni ver películas en su teléfono inteligente son las mejores maneras de distraer a su automóvil. Porque exactamente estos métodos promueven la enfermedad del viaje..

La enfermedad del viaje puede ser angustiante para los niños. Algunas precauciones pueden ayudar. Imagen: Marén Wischnewski / Fotolia)

Si los niños en el auto son malos o no, pero es muy diferente. Incluso los médicos no conocen una explicación general por el hecho de que algunos no están afectados en absoluto y en otros, las náuseas y los vómitos se producen aún más. "En algunos, el órgano de equilibrio es aparentemente tan sensible que especialmente las fuerzas centrífugas en las curvas pueden provocar náuseas", dijo Hermann Josef Kahl, pediatra en Dusseldorf..

Según Kahl, la llamada "enfermedad del movimiento" (cinetosis) es muy desagradable, pero inofensiva en la mayoría de los casos. La náusea es causada por una "confusión" del cerebro, porque cada persona generalmente se basa, por una parte, en la percepción de los ojos y en la otra, por la sensación de equilibrio en el oído interno. Sin embargo, lo que importa es qué información se transmite desde los sistemas de orientación al cerebro: si los estímulos recibidos coinciden, todo está bien. Sin embargo, cuando el cerebro recibe señales conflictivas, cambia a un "estado de alerta" y, como resultado, el cuerpo reacciona con náuseas, mareos y malestar general. En el automóvil, esto sucede con relativa rapidez cuando hay más movimiento del que se puede ver, por lo que los niños se sienten particularmente angustiados cuando leen, por ejemplo..

Mejor mirar por la ventana que leer. 
Sin embargo, según Kahl, los padres pueden hacer mucho para que su viaje en automóvil sea un poco más placentero. Por encima de todo, una gran cantidad de aire fresco es importante, por lo que debe tomar descansos a intervalos regulares, en los que los niños pueden moverse fuera del automóvil. Además, el experto recomienda que los niños vulnerables no coman tanto antes de un largo viaje. También es útil si los padres dejan que sus hijos miren por la ventana tanto como sea posible, porque las curvas y los bultos también se perciben visualmente, por lo que se puede evitar una diferencia en la percepción entre el ojo y el oído interno. Por otro lado, mirar las cosas hacia abajo tiende a provocar náuseas, por lo que los libros, computadoras portátiles, tabletas y juegos de mesa sobre la marcha, especialmente para niños vulnerables, no son un pasatiempo apropiado para conducir. (Sb)